Sauna y masaje: la combinación perfecta
Pocas combinaciones de bienestar se complementan tan poderosamente como la sauna y el masaje. Juntos forman una terapia completa para el cuerpo y la mente: el calor prepara los músculos y el masaje termina el proceso de liberación y renovación.
Primer paso: la sauna
Pasar de 10 a 15 minutos en la sauna antes del masaje aumenta la circulación sanguínea, ablanda el tejido muscular y abre los poros. Este calentamiento natural permite realizar un masaje más profundo y eficaz sin esfuerzo ni molestias. La sudoración también ayuda a expulsar toxinas y prepara el cuerpo para la relajación.
Segundo paso: el masaje
Tras el enfriamiento y un breve descanso, el cuerpo está listo para el masaje. Los terapeutas pueden trabajar de forma más intuitiva sobre los músculos relajados, consiguiendo una liberación más rápida de las tensiones. El calor ayuda a distribuir uniformemente los aceites, mejorando su absorción y aroma.
Ventajas de la combinación
- Mejora la recuperación muscular y la flexibilidad
- Mejora la desintoxicación y el tono de la piel
- Relajación más profunda y mejor sueño
Spa Esmeralda ofrece paquetes combinados para los huéspedes que desean el ciclo completo: calor, frío, tacto y descanso. Juntos, la sauna y el masaje equilibran los elementos del cuerpo: fuego, agua y respiración.
